El requisito del amortiguador es que los resortes no se estabilicen inmediatamente, es decir, después de que el resorte se comprime y se suelta, este continuará estirándose y contrayéndose durante un período de tiempo, de modo que el amortiguador pueda absorber los impactos causados por el encuentro con caminos irregulares, proporcionando así comodidad al conducir